viernes, 14 de diciembre de 2012

Inocencia

Él era diferente a cualquier persona que pudieras conocer, simplemente era único. Hablaba demasiado, y muy rápido, a veces las cosas que no decían no tenían sentido, pero sin embargo había algo en él que le gustaba, que le daba curiosidad, para ella, él era la persona más dulce, tierna, adorable e inocente que había conocido, adoraba pasar tiempo con él, tan sólo mirando como hablaba pues a veces se perdía en sus palabras. Los ojos de él brillaban cada vez que la veía, no se daba cuenta de que se estaba enamorando. Ella también lo hacía, y cada vez que él decía "Te ves tan bonita", sabía que no existían palabras más sinceras; cada día que pasaba lo quería un poco más, aún si nadie lo notaba. 

A veces él la buscaba tan sólo para estar unos minutos a su lado, le bastaba con verla, pero él jamás había tenido novia, jamás había besado a nadie, era inocente, la quería de verdad, y nunca antes había sentido algo así, tenía tanto miedo de que ella no lo quisiera, que lo rechazara, algunas veces la tomaba de las manos, la miraba a los ojos y sonreía, esos momentos eran cuando sus ojos más brillaban, cuando veía sus labios rojos como el carmín. cuando las ganas de besarla lo llenaban enteramente, pero nunca lo hacía. Ella tan sólo esperaba el momento, no se atrevía a dar el primer paso por temor a equivocarse, sabía que a él ni siquiera le gustaba despedirse o saludar con un beso en la mejilla. 

Quizá esta historia no tiene un final feliz, quizá pueden vivir eternamente enamorados sin decirse nada el uno al otro, quizá no, quizá él por fin se atreva y le robe ese beso que tanto desea.

Era una fría tarde, el viento soplaba fuertemente jugando con los cabellos de la chica, él jamás la había visto más bonita, le tomó la mano, la miro fijamente y luego sonrió, solía hacer eso con frecuencia, ella le devolvió la sonrisa y después bajo la mirada, le apretó la mano y un "Te quiero" se escabulló de entre sus labios, él no podía creerlo, la detuvo y la tomó de los hombros, acarició su mejilla y una vez más la sonrisa se dibujaba en sus bocas "Qué bonita eres" ella se sonrojó, se acercó a él y simplemente lo abrazó.

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Paraíso artificial...

Últimamente he deseado escribir, más que nunca en mi vida, quizá sea por el libro que estoy leyendo, me ha hecho pensar tantas cosas, me hace saber que no soy la única, mis emociones se van porque ya están plasmadas en un libro, aún así, ahora entiendo muchas cosas, demasiadas que nunca jamás le había dicho a nadie, que quizá jamás lo hubiera hecho. Sin embargo, ahora también algunos pensamientos vuelven a mi, no quiero acabar así, o quizá sí, aún no me he visto, bueno sí, sí lo he hecho, he visto a la gente que me quiere junta en un sólo lugar, sus caras son tristes, y una que otro lágrima cae, los veo vestidos del mismo color que la oscuridad, asustados, pensando, pregúntandose porque yo he hecho aquello, pero entonces me sentiría mejor, ya no sentiría, mejor dicho, podría estar en paz, o algo parecido. 

"Una vez en una hoja amarilla de papel con rayas verdes
escribió un poema
y lo llamó "Chops"
porque así se llamaba su perro
y de eso trataba todo
y su profesor le dio un Sobresaliente
y una estrella dorada
y su madre lo colgó en la puerta de la cocina 
y se lo leyó a sus tías
ese fue el año en el que el Padre Tracy
llevó a todos los niños al zoo
y les dejó cantar en el autobús
y su hermana pequeña nació
con las uñas de los pies diminutas y sin pelo
y su madre y su padre se besaron mucho
y la niña de la vuelta de la esquina le envió un
tarjeta de San Valentín firmada con una fila de X
y él tuvo que preguntarle a su padre qué significaban las X
y su padre siempre le arropaba en la cama por las noches
y siempre estaba ahí para hacerlo

Una vez en una hoja blanca de papel con rayas azules
escribió un poema
y lo llamó "Otoño"
porque así se llamaba la estación
y de eso trataba todo
y su profesor le dio un Sobresaliente
y le pidió que escribiera con más claridad
y su madre nunca lo colgó en la puerta de la cocina
porque estaba recién pintada
y los niños le dijeron 
que el Padre Tracy fumaba puros
y dejaba las colillas en los bancos de la iglesia
y a veces las quemaduras hacían agujeros
ese fue el año en que a su hermana le pusieron gafas
con cristales gruesos y montura negra
y la niña de la vuelta de la esquina se rió
cuando él pidió que fuera a ver a Papa Noé
y los niños le dijeron por qué
su madre y su padre se besaban mucho
y su padre nunca le arropaba en la cama por la noche
y su padre se enfadó
cuando se lo pidió llorando

Una vez en una papel arrancado de su cuaderno
escribió un poema
y lo llamó "Inocencia: una duda"
porque esa duda tenía sobre su chica
y de eso trataba todo
y su profesor le dio un Sobresaliente
y lo miró fijamente de forma extraña
y su madre nunca lo colgó en la puerta de la cocina
porque él nunca se lo enseño
ese fue el año en el que murió el Padre Tracy
y olvidó como 
era el final del credo
y sorprendió a su hermana
fajando con uno el porche trasero
y su madre y su padre nunca se besaban
ni siquiera se hablaban
y la chica de la vuelta de la esquina
llevaba demasiado maquillaje
que le hacía toser cuando la besaba
pero la besaba de todas formas
porque tenía que hacerlo
y a las tres de la madrugada se metió él mismo en la cama
mientras su padre roncaba profundamente

Por eso en el dorso de una bolsa de papel marrón
intentó escribir otro poema
y lo llamó "Absolutamente nada"
porque de esi se trataba todo en realidad
y se dio a sí mismo un Sobresaliente
y un corte en cada una de sus malditas muñecas
y lo colgó en la puerta del baño
porque esta vez no creyó 
que pudiera llegar a la cocina."
                                   Anónimo


Y esto, esto simplemente fue todo, no puedo creer como a veces es que las palabras hieren aún más que algo físico. Aún así me sentía bien, en paz, no dolía nada, no sentía nada, el mundo desapareció por unos instantes y sólo estaba yo.


Esta vez sería diferente
ya no habría más poemas que escribir
ni más problemas que enfrentar
ya no tendría que callar
pues ya no vería nada
no tendría que esperar nada
no tendría que finjir más
este último poema sería mi libertad.



domingo, 11 de noviembre de 2012

Un mensaje jamás enviado...

Otro mensaje más que jamás leerá, ¿para qué le escribía tanto? ¿Para qué? claro, porque si no lo hiciera quizá moriría...Aún si no me lee, cada letra que escribo es para él, cada palabra, cada párrafo, cada escrito, sólo para él.

Sentarme en un lugar, ver a la gente pasar mientras el humo de mi cigarro invade la atmósfera y tan sólo pensar en él, en eso se basan mis días ahora, pero esto es sólo porque así lo quiero, si yo le dijera "quiero verte" entonces las cosas serían diferentes, sin embargo, sé que esto es lo mejor, sé que en algún momento desapareceré de su vida, quizá no me olvide, pero se acostumbrará a no verme más, tan sólo eso pido, no importan mis sacrificios, aún si me vuelvo a quedar sola, de todos modos eso es inevitable, había pensado en haber encontrado a la persona adecuada, pero ahora ya no lo veo así, no quiero arruinarle la vida, no vale la pena, todo eso ya no importa, yo tan sólo quiero verle bien, feliz, sonriente como el día en que lo conocí....



Quizá también esté equivocada, no estoy pensando en lo que él quiere, pero nunca lo hago, yo tomo decisiones y no pienso en los demás, quizá le este afectando esto, quizá le valga, pero no lo puedo saber, soy incapaz de preguntarle como está. A veces me imagino escenarios horribles, donde él simplemente muere un día y yo, yo jamás me pudiera despedir de él, darle un último beso, pero no, no me arrepentiría si eso llegara a ocurrir, todo pasa por algo, debo mantener eso siempre en mi mente.

Me gusta imaginar que él está leyendo esto, aunque sé que no es así, que lea cuanto lo extraño, que sepa que lo quiero, tan sólo eso me gusta pensar por ahora...








I MISS YOU SO BAD...






jueves, 8 de noviembre de 2012

Recuerdos de ti...

Hace tanto que no me sentía así, siento que me arrancaron una parte de mi, hace tanto, pero tanto, sí, desde aquel trágico día, desde que me lo arrebataron de mi vida, desde que él murió...

Ya casi es su cumpleaños, 18 tendría ahorita, y si me viera ahorita, si me viera así como estoy, entonces las cosas serían distintas, incluso casi puedo oír sus palabras, regañándome. ¿Saben? aún lo amo, creo que quizá no deje de hacerlo jamás, es difícil de explicar, pero él fue el único que siempre estuvo para mi, el único que logró hacer que yo le hablará, que le contara todo; y ahora, ahora ya no está, se fue. 

He llorado casi a diario, sufriendo en silencio, sin decirle a nadie, después de todo no tengo a nadie, creí tenerlo a él, pensé que quizá el podría cambiar algo en mi, quizá me equivoqué, quizá en algún momento el también desaparezca de mi vida. Sí, me duele, me duele tanto, aquí, en el pecho, es un dolor punzante, siento, siento, no, no sé que siento, tan sólo quisiera verlo ahí, frente a mi, dedicándome una sonrisa mientras yo corro hacia él con los brazos abiertos, pero esto sólo me provoca querer llorar un poco más; mis ojos empiezan a doler, ya no los maquillo como antes, ya no, y, ¿para qué? si al final del día este va a terminar corriéndose a causa de unas lagrimas tontas. Le quiero, pero no le quiero decir, callaré todo esto que siento, esto que me mata por dentro, que lo extraño, que duele extrañarlo, no verlo...


Pienso el momento donde el tan sólo pase a ser parte de mis memorias, tan sólo recuerdos que ya no volverán. Quisiera poder cambiar eso, esa parte de mi que no me deja decirle que quizá lo necesite, que tal vez para mi sus abrazos son mi mejor consuelo, pero jamás se lo diré, él nunca lo sabrá, no quiero pensar en el mañana, esta noche tan sólo voy a dormir, no quiero pensar en nada más.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Con Sabor Amargo...

No, no, no, otra vez no... Comencé a sacudir mi cabeza, esto no podía estar ocurriendo otra vez, pero miré mis manos llenas de un líquido color escarlata que escurría por mis dedos para luego manchar al suelo; retrocedí unos pasos con mis ojos abiertos como platos, estiré mis brazos, no los quería cerca de mi, no manchados con culpa. Y ahí, sin vida estaba su cuerpo, tirado sobre un charco de sangre que me reflejaba, las lagrimas comenzaron a amenazar con salir, yo sólo di media vuelta y me eché a correr hacia el lago.






Él había sido tan amable conmigo, aún cuando todos le advirtieron que no me hablara, que era peligroso, que todos los que intentaban ser mis amigos acababan muertos, aún así se arriesgó, creyó que todo eso eran rumores, se acercó a mi, me brindó una sonrisa, el miedo me invadía pero quise pensar que esta vez sería diferente. Pasaron los días, las semana y nada cambió, ningún signo apareció, mi esperanza comenzó a relucir cada vez más fuerte.


Esta vez sería diferente...


Llegó la noche, ambos caminábamos por el centro de la ciudad, y de pronto sin decirlo me tomó de la mano, pude sentir como los colores subían a mi rostro y como mi corazón se aceleraba, volteé a mirarlo y pude notar ese brillo en su mirada, como el color de sus mejillas también se encendía y sin notarlo una sonrisa se escapo de mis labios. La luna mostraba todo su esplendor, aquello era por mucho lo mejor que me había pasado. Una brisa fresca acarició mi piel y entonces todo cambió, una nube ocultó a la luna, el frío comenzaba a apoderarse de la atmósfera, él se detuvo y me abrazó y entonces una ráfaga de viento nos latigó, él me apretó con más fuerza contra su pecho.

- No importa lo que pase, quiero que sepas que yo, yo, yo te quiero...

Me dio un besó en la frente, el llanto se apoderó de mi, pude notar como mi miraba cambiaba al ver la expresión de su rostro al mirarme

- Yo, lo, lo siento

Se alejó unos cuantos pasos, me miro lleno de horror

- ¿Qué está pasando?

Dejé de llorar, luché contra mis instintos

- Debiste escucharlos, no debiste de haberme hablado aquel día, ahora corre, ¡corre!

Comenzó a retroceder, cada vez más rápido hasta que yo comencé a avanzar hacia él

- Que el juego comience

Él tan sólo dio media vuelta y empezó a correr, que ingenuo era, jamás podría escapar de mi. Lo dejé esconderse para luego buscarlo, siempre era más divertido de esta manera, los humanos siempre eran tan inocentes, tan débiles, tan inofensivos. Cuando por fin lo encontré algo en mi quería pasarlo por alto, pero tan sólo fue un instante. Entré a su escondite y lo vi, temblando, suplicando por su vida, diciendo que "eso" no era yo, pero estaba equivocado "eso" era mi verdadero yo, y entonces simplemente le corté la garganta...

martes, 6 de noviembre de 2012

Explicaciones...


A veces no existen explicaciones para todo, sin embargo los seres humanos siempre necesitamos una, es parte de ser seres racionales...

A mi jamás me gustaron las explicaciones, si alguien hacía algo que me afectaba y luego me decía "déjame darte una explicación" siempre pensaba que sí esa persona lo había hecho era por algo, y que yo no merecía una explicación, siempre fue así, hasta que él se quitó la vida, entonces los "¿por qué?" Comenzaron a llegar a mi cabeza, a invadir cada pensamiento hasta no dejarme dormir, ¿por qué me había dejado? A caso, ¿ya no me quería?...

Pero eso jamás lo sabría, él ya estaba muerto, no podría contestarme. Él siempre dudaba de mi, de mi cariño, de lo que sentía, eso siempre destruía mi esperanza, por dentro cada palabra me mataba, pero no le decía nada, él no tenía que saberlo. Yo lo quería de verdad, me importaba, me preocupaba por él, pero él no lo tomaba en cuenta...

lunes, 5 de noviembre de 2012

Noviembre con N de nostalgia...


Iba a escribirte una carta, pero esta vez quería que fuese diferente, de distinta manera, claro, porque sé que esto tampoco jamás lo leerás...

A veces hay momento de tu vida donde lo que más quieres es simplemente tener un hombro en donde llorar, normalmente la mayoría de las personas tienen amigos que los consuelan, que están siempre a su lado, que son inseparables, que incluso cambian el término de amigo a "mejor amigo". Sí, así es, la mayoría de las personas tiene uno en su vida, pero yo, bueno, yo soy un caso distinto, cada vez que creo tener un mejor amigo algo hago mal y pues simplemente lo acabo perdiendo, mi culpa, desde luego, pero quisiera siempre tener la esperanza de que algún día simplemente encontraré a alguien que realmente entienda como soy, sí, eso quisiera, pero mi realidad es otra... Así cómo empecé a dudar de la existencia del amor y finalmente decidí dejarlo en sólo algo pasajero, temporal, en una simple ilusión, ahora vuelve a pasar lo mismo con esto que yo considero lo más importante en mi vida, si dudo de la amistad, entonces, ¿en qué creo?

Un viernes me desperté llorando, con mi corazón roto, había perdido de nuevo a mi mejor amigo, mi esperanza se estaba desvaneciendo, pero había algo que aún la mantenía con vida, bueno, no algo sino alguien, ese día aún cuando amanecí sola pensé que todo cambiaría con su llegada, me puse a esperar con lágrimas en los ojos, ilusionada quizá, sabía o quería pensar que él y su sonrisa harían que las cosas estuvieran mejor, estaría ahí para poder enjugar mis lágrimas y dibujarme una sonrisa, pasaron los segundos, los minutos, las horas y la esperanza cada vez se perdía más, y entonces lo entendí, yo estaba sola, siempre lo había estado pero lo quise negar, quería creer que en algún momento de mi vida eso cambiaría que quizá el sería la diferencia, pero me equivoqué, fallé de nuevo, me fallé a mi misma, quise creer en una mentira pero sólo me estaba lastimando, sí, sola, sola pasaría las noches de invierno recostada en una cama cubierta con cobijas mientras miraría al techo pensando en el quizá, en un hubiera. 

Mil cosas cruzaban por mi mente, tantas ideas, y cada una de ellas única, pero después de todo esto es lo que soy, si no puedo encontrar un amigo en el que pueda confiar, entonces, entonces nada se puede hacer, si todo lo callo en lo más profundo de mi ser, si cada sentimiento es enterrado sobre toneladas de máscaras, si yo soy la que simplemente no quiere cambiar, entonces, entonces no existe solución; fue entonces cuando lo entendí, ya no tendría que sonreír porque en algún momento todos se olvidarían de mi, todos simplemente no podrían seguir preocupándose por alguien que quizá disfrutaba estar así, no podrían seguir preguntando los porque sin obtener respuestas, pronto algún día todos se cansarían de mi, sí, así será, quisiera poder pensar en algo para poder contradecirme, pero esto, esto es todo lo que soy, lo que tengo y es algo que simplemente no puedo dejar...


Y sí, tengo miedo, miedo, no, no a quedarme sola, eso, bueno, eso realmente no importa mucho, tengo miedo de lastimarte, de decepcionante, de fallar. Quisiera simplemente creer que todo va estar bien, pero no puedo si al despertar lo primero que hago es estar sola, es sentarme en mi cama y tan sólo quedarme hundida entre el silencio infernal que existe en las mañanas, o a veces tener que escuchar gritos, insultos, reclamos, y querer ponerme audífonos para borrar todo eso, pero no, no es así, la música sólo me hace entrar en mi mundo lleno de mentiras, donde todo está bien, es como dormir despierta. Ni siquiera en mis sueños puedo estar tranquila, las pesadillas me consumen, noche tras noche, no, a veces tan sólo quisiera que alguien me abrazara y me dijera "Tranquila, mañana todo mejorará" que me besará la frente, que se quedará conmigo a pesar de todo, que no me dejará llorar, y que aún si las lágrimas tientan con salir simplemente me dijera que llorar es bueno de vez en cuando, pero esos son tan sólo sueños inalcanzables, nada más que eso. 



Sí, podría estar aquí escibiendote eternamente, sólo así mi alma descansa, sólo con un pedazo de papel y lápiz puedo desahogarme, sólo escribiéndote algo que sé que jamás leerás, sólo así me siento mejor, sólo así puedo imaginar que estás leyendo esto, que me comprendes, que quisieras abrazarme perla estás muy lejos para poder hacerlo.

jueves, 18 de octubre de 2012

Percepción...

Se dice que todo lo que vemos depende de como queramos verlo...

No, yo no lo quería así, siempre le sonreí a la vida ante todo, me decían que sí yo le sonreía, ella me sonreiría, claro, no siempre era así; a veces la vida era demasiado cruel, hubo tantas veces que desee con todas mis fuerzas dejar de luchar por algo que simplemente no me daba nada a cambio.



En medianoche la luna destellaba
sobre suaves cabellos como plumas enredadas


Solía tener sueños tan extraños, pero a final de cuentas, sólo eran eso, sueños.

De vez en cuando amanecía llorando, con rasguños, moretones, con el cuerpo adolorido, con los puños cerrados.


Entra mares de sangre combatía
a veces unas cuantas vida tomaba
otras veces las perdonaba


Todos siempre me miraban raro, me ignoraban, siempre estuve sola, pero no importaba, era fuerte, o eso creía, no necesitaba a nadie, no...


Cada noche bajo las estrellas
por el mundo luchaba ella




Nadie conocía lo que esa chica hacía, sus sueños eran más que eso, ella era la que cuidaba al mundo de todo mal, su cuerpo era tan sólo una envoltura para lo que vivía dentro de ella, un ángel que protegía al mundo, un ángel despreciado por sentir compasión, por sentir amor hacia unos seres que no apreciaban lo que hacía por ellos.

martes, 2 de octubre de 2012

Con los ojos cerrados...

Hay veces que no es que no sepamos lo que pasa a nuestro alrededor, simplemente preferimos ignorarlo...

Hoy es un día especial, un día de luto, hoy es un día donde hace muchos años los estudiantes lucharon por sus derechos y libertades, donde fueron atacados brutalmente por el gobierno, que sin embargo su impacto no fue el deseado, que se vio de cierto modo "opacado" por la celebración de los Juegos Olímpicos, sí, si bien muchas personas quizá ya ni lo recuerden, los estudiantes, aún si no vivíamos en ese entonces, siempre llevamos esos recuerdos con nosotros  ¿por qué? sencillo, nosotros también somos estudiantes, y si nosotros hubiéramos sidos los que hubiéramos luchado en esa rebelión y hubiéramos muertos nos gustaría que alguien lo recordara, y que no hubiera sido en vano, sin embargo, tristemente, a veces no es así. 

A veces nos gusta vivir cegados antes las cosas que pasan a nuestro alrededor, porque quizá es más fácil que tratar de luchar para cambiarlo, claro, por otra parte, algunas otras personas quieren luchar por cambiar al país, pero no usan los medios adecuados; lamentablemente nuestro país se encuentra de una manera deplorable en cada aspecto que se pueda pensar, pero si queremos un cambio, aunque suene tonto y repetitivo  debemos empezar por nosotros, esos pequeños cambios a veces son los que hacen grandes diferencias, primero se debe empezar por lo básico y luego intentar algo más radical  no debemos irnos a los extremos, a todo se debe encontrar un punto medio. Hoy en mi escuela leí un cartel que decía "La sumisión es muerte, la rebeldía es vida", me hicieron pensar, realmente lo hicieron, pero no estoy de acuerdo, no, la rebeldía no es vida, la rebeldía es no estar conforme con nada, nunca, si siempre eres rebelde, jamás estarás feliz con lo que tienes, podríamos vivir en un país perfecto y aún así habría algo que no les gustaría, con esto refiero a mi punto de que tenemos que encontrar el equilibrio ante todo. 

Yo, bueno, yo hoy sólo quizá guarde un minuto de silencio en nombre de todos ellos, quizá se merecen más, pero por ahora es todo lo que puedo ofrecer, ya que ir a la marcha, bueno, uno nunca sabe que pueda suceder. 

Sólo me resta decir, 

2 de Octubre, no se olvida




domingo, 2 de septiembre de 2012

Empezando de nuevo...

De nuevo amaneció. El sol salía del horizonte mientras yo lo observaba cuidadosamente, todo estaba tranquilo, callado, sereno. Yo por mi parte estaba sola, sentada a la orilla de la cama, frotándome las piernas para tratar de darles un poco de calor, hacía frío; me levanté a cerrar las cortinas, no quería ver otro amanecer, ya no. Me acosté de nuevo en la cama, me cubrí la cara con la almohada, cerré mis ojos, quería volver a soñar otra vez, pero no podía, por más que apretaba los ojos y me forzaba a no pensar, no podía evitar aspirar su aroma, sentir su cálido abrazo a mi lado, cambié mi posición, quizá era eso, volví a cerrar los ojos y entonces comencé a soñar...

Caminaba sin rumbo, estaba todo completamente blanco, no había nada ni nadie, estaba sola, perdida, pero estaba feliz, la sonrisa en mi rostro lo decía, todo se sentía tan bien; alcé los brazos y comencé a girar, quería bailar, después me caí y comencé a reír, estaba tan feliz, tan contenta, corrí por todos lados y a la vez ninguno, mi rostro me dolía de tanto sonreír. Saltaba, reía, bailaba, era feliz, realmente era feliz.
Pero, ¿por qué? no entendía nada, sacudí mi cabeza, eso no importaba, la felicidad no tenía precio.


domingo, 12 de agosto de 2012

Una leyenda más...

Hace mucho tiempo, en un lugar muy lejano, alejado de todo, en medio de las olas, donde la luna dormía y las estrellas descansaban, habitaba una muchacha, de finas facciones y menudo cuerpo, ella cantaba todo el día sin parar, y la leyenda cuenta que los jóvenes que oían de aquella señorita, y de su belleza, intentaban ir hacia ese lugar y conquistar su amor, pero jamás nadie pudo lograrlo, los retos que estaban en el camino les hacía imposible si quiera llegar a la mitad del trayecto; sin embargo, como en toda leyenda, existió un joven que pudo lograrlo, y esta, esta es su historia...

"Una joven de indescriptible belleza, de impresionante voz, de hermosas cualidades, jamás vista por alguien humano, tan sólo una leyenda más, cientos han luchado por verla, y han muerto en el intento, pero él era diferente, quizá no era fuerte o muy inteligente, pero su voluntad era la más fuerte. Atravesó por los mares llenos de trampas, logró pasarlas todas, llegó hasta la isla, comenzó el camino a pie, la travesía era larga, pero su voluntad era aún más grande. Él sólo pensaba en ella, se la imaginaba, soñaba con su figura, con su rostro, con oírla cantar, y de pronto ahí estaba, la vio, de espaldas, sentada junto a la luna, cantando, soñando con los ojos abiertos, su voz era lo más hermoso que alguna vez había escuchado, todo era magia a su alrededor, el aire era distinto, había un aroma dulce, y a su alrededor había un aura que hacía que sus cabellos parecían hilos de luz entrelazados, sí, era lo más hermoso que jamás había visto, iba más allá de la belleza humana. Caminó lentamente hacia ella, alzó su mano, quería tocarla, saber que era real; estiró su brazo, sus dedos, casi podía rozarla, sentía una brisa a su alrededor, se sentía tan exquisito... Pero cuando la tocó, todo se extinguió, se fue, y en su lugar, unas florecillas rojas empezaron a surgir de la tierra, todo se llenó de ellas, incluso él, de su piel comenzaron a brotar también, llenando aquel lugar de sangre, sus gritos infernales destrozaron la atmósfera, pero el había cometido algo imperdonable, nadie podía tocarla, ella era sagrada, algo sobrehumano, pero sin embargo, esas flores que surgieron en su lugar florecería sólo una vez al año, recordando la belleza infinita y también que alguna cosas tenía que quedar sin ser descubiertas, esas flores de 4 hojas, rojas como la sangre, de tallo verde, tan verde, lleno de vida, esas flores que luego sería nombradas Tulipanes, representando la belleza y la voluntad por querer encontrar algo, sí, eso era, esta leyenda que jamás sería contada, pero que viviría para siempre en la belleza de una simple flor, sin saber que  era en verdad" ...


jueves, 2 de agosto de 2012

Un cuento de hadas...

Siempre soñé con ese alguien especial, alguien que cuando estuviera conmigo dijera "Ya no necesito a nadie más, contigo lo tengo todo" y luego abrazarnos, besarnos y claro, ser felices para siempre.


Lo sé, aquello era estúpido, pero, pero era una niña, soñaba a jugar con las estrellas, con ser una princesa de algún reino perdido, con encontrar a mi caballero de brillante armadura que mataría al dragón sólo por tener mi amor. Tan sólo soñaba, sin tenerle miedo a nada, el mundo era mío. Sin embargo, con el paso del tiempo esta ilusión fue muriendo, deje de jugar con estrellas y de soñar con encontrar al amor. 

Me dediqué a cosas importantes, los estudios, mis amigos, y planear que iba a hacer con mi vida, 19 años de mi vida y jamás había besado a alguien, tenido una cita, estado con alguien, no lo necesitaba, tenía todo, era una alumna de excelencia y mis amigos lo eran todo. Pero un día, caminando por el parque, algo comenzó a dolerme, algo dentro de mi, como si me arrebataran algo, no le di importancia, pero pronto comencé a extrañar a alguien, ¿cómo era posible aquello? ¿cómo no iba a saber a quién extrañaba?. Continué mi camino, miraba todo como si fuese la primera vez que lo viera, me sentía extraña, sentía algo que helaba mi sangre. Brillante Armadura. Ojos cafés. Mi corazón. Las estrellas. 

Esa noche no pude conciliar el sueño, sólo pensaba en los cuentos que solía leer, en como la princesa encontraba a su ideal sin hacer nada, sólo estando sentada, siendo bonita; pero todo eso sólo eran cuentos, historias de fantasía, en la vida real, nada era así, el amor era sinónimo de sufrimiento, agonía, dolor, mentiras, falsedad, engaños y sólo a veces, a veces podía darte una chispa de felicidad. Yo, yo jamás lo necesité, sí, es cierto que alguna vez soñé con encontrarlo y ser feliz a su lado, pero ahora sabía que eso era tan sólo un sueño. 

La sonrisa de mi rostro comenzó a desaparecer, cada día, me más costaba trabajo poder dibujarla, ¿por qué? no lo comprendía, lo tenía todo, estaba en la mejor etapa de mi vida, la Universidad, mis amigos y esa beca completa que tenía para ir a Moscú, iba a hacer mis sueños realidad, iba a poder ser una gran bailarina de la mejor compañía del mundo, sí, ya tenía mi vida planeada, entonces ¿por qué no me sentía como antes?. Comencé a preguntarme que había hecho mal, si todo iba tan bien, muchos envidiarían mi vida, digo, sí, quizá no tendría a alguien a quier amar, pero ¿eso qué importaba? no lo necesitaba, yo no necesitaba que alguien me amase, que estuviera conmigo en todo momento, que me dijera de cursilerías y cosas tontas que no quería escuchar. Iba tan perdida en mis pensamientos que no me di cuenta de los escalones, de pronto sentí una mano que me tomaba del brazo y me llevaba hacia él, me cubrió entre sus brazos, se sentía tan cálido.

- ¿Estás bien? - no quería mirarlo, había sido mi culpa, él me había salvado de una peligrosa caída
- Ahm, sí, gracias, lo siento, de verdad muchas gracias - y entonces había algo en su forma de mirarme, de sonreírme, sentía como me ruborizaba, tuve que bajar la mirada
- Ha sido un placer, pero, jamás te había visto por aquí ¿eres nueva? 
- Algo así
- Pues, mucho gusto, me llamo Alberto - su nombre resonaba en mi mente, mis manos comenzaban a sudar, estaba tan nerviosa, estiró su mano hacia mi, me quedé paralizada por unos instantes.
- ¡Ah! sí, me llamo Andy, bueno Andrea, tu sabes Andy es su diminutivo - "Cállate, estás haciendo las cosas mal" ¿Por qué estaba tan nerviosa?. Él comenzó a reír, y no pude evitar seguirle.
- Tienes una risa muy bonita ¿te lo habían dicho? - volvía a sonrojarme, podía sentir el calor de mis mejillas - Y te gustaría tomar algún café o ir a comer algo quizá algún día - ahora era él quien estaba rojo, yo le sonreí
- Sí, quizá algún día estaría bien - di media vuelta y me fui, pero esta vez sería diferente, ya no sentía esa extraña sensación en mi pecho, ahora sabía que era lo que necesitaba, esta vez podría ser feliz. 


martes, 31 de julio de 2012

Lo que ella no sabe...

Hoy me estuve preguntando todo lo que no le he dicho, han sido tantas cosas...

Ella no sabe cuanto es que la quiero, que jamás he querido así.
Ella no sabe que lo extraño, que ansío por verla y poder abrazarla.
Ella no sabe que la necesito, sus abrazos, su aroma, sus besos.
Ella no sabe lo que pasa por mi mente cuando la veo, cuando está cerca.
Ella no sabe que la espero, que pasaría una eternidad así.
Ella no sabe lo que sufro, en silencio, por sus ojos, por su voz.
Ella no sabe el deseo que tengo, esto que siento que llena mi interior.
Ella no sabe lo que significa para mi, lo que cambió con su llegada.
Ella no sabe cuanto añoro escucharlo, verla sonreír por mi mirada.
Ella no sabe que para mi no hay nada mejor que estar entre sus brazos.
Ella no sabe que sus besos me hacen alucinar, perder el control.
Ella no sabe que a su lado no tengo miedo, que lo tengo todo.
Ella no sabe que siempre está en mis sueños, mis pensamientos.
Ella no sabe mi pánico a perderle, a no verla nunca más.
Ella no sabe cuanto me duele el no saber de ella.
Ella no sabe que la admiro, cada detalle, cada parte de su ser.
Ella no sabe lo que sueño, una vida a su lado,  no volver a separarnos.
Ella no sabe de lo que sería capaz de hacer por ella, tan sólo para verla feliz.


Pero no quiero decirle, no debe saberlo, esto que siento es mejor que quede en silencio, en algún lugar de mis recuerdos, donde siempre esté presente. Una historia más de amor, donde el final no es feliz. Sólo un cuento más, un sueño sin final. No, no puedo decirle. Tan sólo soy un humano enamorada de la luna, inalcanzable, hermosa. Pero estoy enamorado, como jamás lo había estado.
Quizá pueda hablar de amor, de ella, no, esto no es amor, esto va más allá es algo nuevo, o tal vez jamás había sentido verdadero amor, hasta que la vi por primera vez, bajo aquel árbol, sentada, viendo el esplendor de un atardecer, nunca antes había visto algo tan hermoso, sus ojos, sus facciones, su cuerpo, su sonrisa y ese brillo en la mirada, lleno de inocencia, de pureza, parecía tan frágil, tan delicada, ¿Cómo pude atreverme a enamorarme? aún sabiendo que aquello era prohibido.
Quería tenerla entre mis brazos. Susurré un deseo al viento y luego amanecí a su lado, era tan bella, con miedo rocé su piel, tan suave, tan tersa, nunca podré olvidar la electricidad de mi cuerpo cuando toqué sus labios por primera vez, ¡oh! que sensación tan más perfecta fue aquella. Sí, yo era feliz, pero un día la duda se apoderó de mi, ¿Cómo algo tan hermoso podía ser mío? No, eso no estaba bien, no lo merecía. Cada que la veía despertar me preguntaba si era feliz, ella no sabía que lo era todo y un dí así, ella me dejó.

sábado, 28 de julio de 2012

Un cielo diferente...

Desperté ese día pensando que sería mejor, que todo estaría bien, ¡tonta!


Salí a la calle, estaba sola, muchas ideas corrían por mi mente... Muerte... Sangre... Decepción...




Jamás pude ser lo que los demás esperaban de mi, le había fallado a todos. Todo lo que hacía siempre estaba mal, siempre, "¿Qué no puedes hacer nada bien?" esas palabras estaban ahora marcadas para siempre en mi alma, tatuadas en lo más profundo de mi. Yo era tan miedosa, para todo, no creía tener el valor para poder quitarme la vida, pero había aprendido a callar lo que sentía, a dibujarlo con una sonrisa; me hundí en la música, en el alcohol. Sola, en mi cama, mirando hacia el techo, sintiendo como todo daba vueltas, estaba mareada; me levanté y busqué algo donde apoyarme, sostuve mi cabeza con una mano, me dolía, y de pronto, sentí algo húmedo, lleve mi mano hacia donde la pudiera ver, eso era ¿sangre?  Me desvanecí en el suelo.

...



No sé que fue lo que pasó, ahora yo estaba en el hospital, ¿Cómo había llegado ahí? no tenía nadie, y nadie sabía que yo me encontraba ahí, inconsciente. Comencé a llorar, ¿Por qué no me había dejado morir? ¿Por qué? Si tan sólo estaba estorbando en este mundo. Intenté levantarme de la cama, pero estaba atada por unos tubos, los arranqué de mi piel, no me importó el dolor, la sangré corría y un espantoso sonido salía de algún aparato, la bata comenzó a bañarse de escarlata. Caminé sin saber a donde ir, sólo quería irme de ahí, no debía estar ahí, yo, yo tenía que morir, no sé de donde saqué el valor de decirlo, quizá era la adrenalina que ahora corría por mis venas cubriendo cada parte de mi cuerpo. No había nadie que me lo impidiera, nadie me extrañaría ni se acordaría de mi y así, por primera vez en mucho tiempo comencé a sonreír de verdad, no tuve que forzar la sonrisa que ahora se veía en mi rostro, no, esta vez no, esta vez iba a ser diferente, comencé a buscar algo sin saber que era, sólo sabía que cuando lo viera, entonces habría terminado todo.
"¿Quién es la miedosa ahora?" recorrí los pasillos de aquel lugar, nadie me veía, era invisible, las punzadas de dolor comenzaron a fluir con más fuerza, no importó. Quería cambiar, que por primera vez en mi vida pudiera hacer algo bien, ser valiente. Entonces, la vi, una salida. Abrí la puerta y la luz del sol me cegó durante unos instantes, ¿siempre era tan brillante? no lo recordaba así, para mi el cielo siempre había sido opaco, siempre el mismo. Caminé hacia la orilla del techo, contemplé todo, tenía el mundo a mis pies; extendí los brazos y deje que el viento jugara con cada cabello, sentía el calor del sol recorrer mi piel, incluso el dolor ya no lo sentía. Comencé a caer, sin dejar de sonreír ni cerrar los brazos, aquello se sentía tan bien, yo estaba viva, vivía y luego todo terminó...

martes, 24 de julio de 2012

Algo más...

Quisiera ser algo diferente, algo que dure para siempre.

Sí, eso quisiera...




Podríamos habernos besado eternamente, jamás soltarnos de las manos, fundirnos en ese abrazo, pero no, no lo hicimos; dejamos pasar el momento, nuestro amor se fue consumiendo, se fue acabando, todo iba a terminar. Corrí, no quería dejarlo, lo amaba, realmente lo hacía. No podía concebir mi vida sin él. Pero yo, yo no era su felicidad.

Lo vi alejarse de mi, caminar en una dirección opuesta hacia donde yo iba, no se atrevió a mirar atrás, quizá no quería verme ya más, alcé la mano para intentar alcanzarlo, y luego la bajé, tenía que dejarlo ir. La lluvia comenzó a caer, levanté la mirada al cielo, todo había terminado, jamás lo volvería a ver. Hubiera querido un último beso, sólo uno más, mirarle a los ojos y decirle que lo amaba como jamás volvería a amar, que esto que sentía en mi pecho quemaba, pero quizá también lo hubiera suplicado que no me abandonara, las lágrimas comenzaba a caer al compás de la lluvia, formaban una exquisita melodía. Caminé sin rumbo fijo, ya no tenía ningún propósito en la vida más que esperar la lenta y dolora muerte que esperaba por mi. 

El viento tiraba contra mi piel. Me abracé fuertemente, busqué un lugar donde refugiarme, pero no había nada. "No importa, estaré bien" seguí caminando la lluvia cada vez llegaba con más fuerza. "Él prometió que siempre estaría conmigo" no, no, no tonta, tonta, él no era feliz conmigo, jamás lo fue, él merecía algo mejor, alguien que de verdad lo quisiera, que le dedicara cada una de sus sonrisas, que lo amara sin condiciones; yo, yo jamás podría haber hecho eso, sólo lo atormentaba, había sido tan egoísta al creerlo sólo para mi, estaba tan cegada por el amor "No, eso no era amor" sí, tenía razón, eso no era amor, si lo hubiera amado me habría dado cuenta de que no era feliz a mi lado, de que el brillo de sus ojos se había estado apagando con el paso del tiempo. "Jamás te amó" quería que esa voz se callara, sacudí mi cabeza, comencé a correr, las gotas ya no dolían tanto, los recuerdos amenazaban con empezar a aparecer, corrí más rápido, y entonces tropecé y ahí estaba él, con su sonrisa, mirándome como si jamás antes me hubiera visto.

- ¿Estás bien? - me preguntó, sus ojos volvía a tener ese brillo; tomó mi mano y me ayudó a ponerme de pie. ¿No me recordaba? asentí con la cabeza
- ¿Por que corrías? 
- No lo sé, creo que simplemente dejé de creer en el amor


El frunció la boca, me miró y luego comenzó a reírse, no pude evitar reír también, jamás creí esto posible, volverlo a ver, sonriendo, para mi...

- No lo hagas, simplemente es cuestión de encontrar a la persona adecuada

Le sonreí una vez más, di media vuelta y comencé a caminar.


viernes, 20 de julio de 2012

Incertidumbre...

Me cuesta respirar...
Quizá, quizá este sea mi último aliento.

Puedo verlo, su sonrisa. Ríe, mi sufrimiento lo hacer reír. El brillo de sus ojos al ver mi sangre, ese brillo es inigualable, esa satisfacción que transmite al verme ahí, tirada, suplicando por mi vida. 
Camina a mi alrededor, se inclina para verme más cerca; el tiempo se detiene, puedo sentir su respiración sobre mi piel, no puedo moverme. Voy a morir. 
Cierro mis ojos y escucho su respiración cerca de mi oído, puedo notar su sonrisa burlona, puedo sentir su mirada atravesando mi cuerpo, observándome escrupulosamente, cada detalle. El corazón se me congela. Se levanta, camina alrededor de la habitación; la lluvia golpea contra la ventana, los truenos retumban en mis oídos. Me punza la herida, pero aún siento como la sangre sale a borbotones, hace frío, me estoy congelando. 

Tantas cosas que había hecho por él, todo el amor que le profesaba, todo eso para nada, él jamás me había querido, los recuerdos se abruman en mi mente, las lágrimas se juntas en mis ojos, no, ya no hay lágrimas no tengo fuerzas ni para llorar, ya no hay nada.


Ilusa... 
Tonta... 
¿Por qué me había dejado llevar? 

Comencé a jadear, ya no podía respirar, el aire no entraba, aspiraba, abría la boca desesperada por conseguir algo, un poco, tan sólo un poco, sentía el sabor de la sangre recorrer mi garganta, ya no podía tragar y luego, luego nada. Perdí la conciencia. Estaba muerta.


lunes, 16 de julio de 2012

Feliz Cumpleaños Beto \o/

Sí, ya sé, hoy no escribiré algo como lo que siempre algo, hoy será especial ¿Por qué? bueno, vuelvan a leer el título de la entrada ... ¿ya? Exacto hoy es su cumpleaños, yo sé que uds. ni lo conocen, pero él es muy, muy importante para mi y se merece esto así que bueno, aquí me tienen, escribiéndole, pero ya, basta de explicaciones...


¡Feliz Cumpleaños! tenía esa idea desde que supe cuando era su cumpleaños, quería poder abrazarlo ese día y decirle lo mucho que lo quería, lamentablemente, no será así, no podré salir con él, pero puedo desearle un feliz cumpleaños igualmente. No, no lo conozco de hace mucho tiempo, pero para mi ha sido el tiempo suficiente para poder tenerle este cariño, él, él es especial, es diferente, y yo le quiero mucho. Y hoy hoy cumple 17 años. 
Yo sé que no le gusta su cumpleaños, así como a mi no me gusta el mío, pero para mi bueno, para mi este día será especial, y así, lo festejaré, tomaré un par de copas en su honor, brindaré a su salud y por que se quede conmigo mucho tiempo más. Quisiera poder darle un regalo que se merezca, pero pues no, sólo puedo darle algo pequeña un abrazo y su beso, quizá no sea gran cosa, pero espero le guste. 
Él es de esas personas en la vida que sólo te encuentras una vez, que agradeces tanto el haber conocido. Yo lo quiero ver feliz, quiero verlo sonreír, eso es lo que más quiero, porque yo sería feliz también, por verle su sonrisa y sus ojos. Ajá, él es una gran persona, diga lo que diga lo es, quizá no es común o parecido a los demás y tiene maneras raras, pero yo así lo quiero porque no sé, no sé, él me entiende y a veces me sorprendo por las cosas en las que se parece a mi. Un 17 de Julio de 1995, que bonito día debió de haber sido, ojalá haya llovido. 
El tiempo se hace más lento esperando a que llegue por fin este día, pero bueno, espero, cada vez falta menos, cada vez el reloj sigue andando. 
"Cuando lleguen las 12" eso es lo que ahora pienso, estoy ansiosa emocionada, pero ahora ya tiemblo menos, es un avance, digo. Y quizá estoy loca, pero como ya dije yo sueño a lo grande inversamente proporcional a mi estatura y si quiero llevar a los TT's #FelizCumpleañosBeto pues eso intento, me gusta soñar, soñar es gratis, creo. Quisiera poder recordar como él cuando lo vi por primera vez, pero sólo recuerdo que traía bermudas y su cabello, es lo malo de no tener buena memoria. Aún así recuerdo otras cosas y esas, esas si ya no se me olvidarán y creo que eso importa ¿no?
Aunque de todos modos hay cosas que debería de olvidar, él, como cuando me vio sonrojada, eso no es bonito, jamás había pasado, no es justo, aún confío en que lo llegue a perder en el mar de sus recuerdos. 
"Sólo una hora más" y mi emoción crece más y más, puede suceder que piense "esta loca me da miedo" pero bueno, no sería la primera vez, simplemente es su cumpleaños, merece un gran festejo, eso, eso es lo que yo pienso. No, no se me acaban las palabras pero por primera vez en mi vida, aún escribiendo no sé como expresarme. 

Pero por ahora un "Feliz Cumpleaños Beto" servirá.

viernes, 13 de julio de 2012

Espera...

Las imágenes pasaban en mi mente, como en un viejo film. Sus ojos. Su sonrisa. Sus manos. Sus labios. Sus facciones. Su rostro. Su cuello. Su cuerpo. Nosotros abrazados, tomados de las manos, besándonos.

Algunas de sus palabras retumban en mi mente aún, como un eco. "Quizá no regrese" sin embargo lo esperaba cada noche, veía a las estrellas y pensaba en su nombre, me abrazaba a mí misma, de vez en cuando las lágrimas rodaban desde mis ojos, no podía evitarlo, lo necesitaba a mi lado. Me gustaba soñar su regreso, su sonrisa diciéndome lo bonita que me veía, lo mucho que me había extrañado, y cuanto me quería, sí, me la pasaba soñando con ese momento, con nuestro reencuentro. 


Días, semanas, meses, años... y el tiempo no dejaba de correr. Sí, quizá jamás iba a volver, pero yo lo quería a él, a nadie más, me encerraba en mi casa, me pasaba las horas viendo nuestras fotos o soñando que al fin regresaba. Unos días mi mente me jugaba sucio, oía su voz venir desde la puerta, corría desesperada a abrirla y cuando lo hacía, no había nadie, nunca lo había. Mi cabello comenzó a teñirse de blanco y yo, yo seguía sentada, frente a la puerta, ansiaba su regreso. 

La esperanza era lo que me daba fuerzas, había algo en mi que me decía que él regresaría, que nos abrazaríamos y por fin seríamos felices; sin embargo, no pasó, él jamás regresó a mi.

Morí esperándolo, morí por mi amor. 

Mi alma no podía descansar, me quedé a vagar por el mundo, lo buscaba, recordaba su rostro aún, cada vez que cerraba mis ojos aparecía en mi, pero, jamás lo encontré. ¿Dónde estaba? él había sido todo para mi, y no pudeverlo una última vez, tan sólo una más, eso, eso era todo lo que pedía.

sábado, 30 de junio de 2012

Alguien especial...

No podía creer lo que estaba viendo, lo tenía frente a mi, tan cerca, tan lejos, no iba a hacer nada, no podía... 

Era un crimen, algo prohibido, y sin embargo la más dulce tentación que había sentido jamás; lo tenía ahí, respirando el mismo aliento, sintiendo lo mismo, mi corazón se aceleraba, nada cambiaría, no iba a hacer nada, nada. Demasiado cerca. Sonrió para mi, sólo para mi, no podía evitar mirarlo y ver sus ojos, su sonrisa, desvié la mirada, notaba el calor de mis mejillas, no iba a sonrojarme; le tomé la mano, le dije que huyéramos juntos, lejos, a donde nadie jamás nos encontrará, me besó la frente y suspiró, su mirada cambió, se tornó fría, soltó mi mano y se alejó.

Esa noche corría detrás de un chico, de alguien que me había cambiado la vida, lo quería a mi lado, lo seguí desesperada con lágrimas en los ojos, hacía frío y no me importaba, seguí corriendo, cada vez más rápido. La luna se burlaba de mi miseria, porque esa noche lo tuve todo, y luego desapareció. No, no, no tenía que ser mío, tenía que tener esa sonrisa, quería verlo despertar cada mañana y besar sus labios, sus manos, su cuello. Caí. Ya no había nada. 

Un día lo encontré, aún recuerdo su mirada, se quedó tatuada en mi alma, él era diferente. 

Cerraba  mis ojos y escuchaba su voz, sentía sus manos, su tacto, su respirar, era extraño, pero así era, lo quería, lo quería con todas mis fuerzas, con toda mi alma, con cada parte de mi ser. Pero, él no, tan sólo había sido un sueño, una ilusión de mi subconsciente para llenar el vació que sentía en mi interior, para poder olvidar las noches tristes que pasé antes de conocerlo, porque con una mirada lo cambió todo, con una sonrisa me enamoró, y eso, eso fue lo que pasó, tuve a alguien que jamás existió, que era demasiado perfecto, demasiado para mi, y sin embargo él, él es el mejor de mis recuerdos.

miércoles, 13 de junio de 2012

Soñando despierto...

A caso ¿era real? ... No lo sé, su cabello azul revoloteando contra el viento, su pálida piel del color de la leche, su delgada figura y sus ojos violeta.
La miraba, no podía dejar de hacerlo, me provocaba una sensación de infinita paz, quería tomar sus manos entre las mías, poder guardar su imagen eternamente en mi memoria. Me volteó a ver, su sonrisa iluminaba su rostro, sin pensarlo coloqué mis dedos sobre su mejilla, los deslicé hasta llegar a su cuello, y luego los regresé hacia el alfeizar.
- ¿No es hermosa la vista? - dijo ella refiriéndose hacia el atardecer que estaba frente a nuestros ojos, las tonalidades de azul que se dibujaban ante nosotros, como la noche devoraba el día y lo escondía detrás del horizonte.
- Sí, es hermosa - pero no dejaba de verla, no podía, sentía una atracción totalmente fuera de lo común, sus ojos me hipnotizaban, sus labios me tentaban, no podía dejar de admirarla. Quería vivir el resto de mi vida a su lado, yo haría cualquier cosa que me pidiera, le daría lo que necesitara, nunca le faltaría nada. Pero, mi amor tenía que permanecer oculto, ardiendo en mi pecho con tal intensidad, no podía revelarlo, sabía que ella no sentía lo mismo.
La noche llevó su manta sobre nosotros, sólo la luz de la luna me permitía contemplar su silueta, ahí, junto a mi, como quisiera haberla abrazado, no soltarla jamás, que se quedará entre mis brazos, besar sus labios, pasar mis dedos entre sus cabellos. No lo hice. Ella no me amaba.
- ¿Sabes? algún día quisiera que alguien me admirara como yo admiro la luna - Si supieras que yo lo hago ahora mismo, que ni la misma luna puede hacer que mi mirada se desvíe más allá de tu rostro
- Quizá ya haya alguien, pero no te hayas dado cuenta
- Uhm - resopló - Quizá, pero por ahora estoy aquí contigo y quisiera vivir el momento, el amor ha de llegar, yo tan sólo debo esperar - sonrió y regresó la mirada hacia el cielo, apoyó su cabeza en mi hombro, la abracé y ella volteó su mirada hacia mi rostro
- ¿Me quieres? - preguntó con tristeza
Mis dedos llegaron a su mejilla, le besé la frente, ¡Qué pregunta tan tonta era aquella! ¿Quererla?, yo la amaba, pero no podía decirle mi amor.
- Más que a mi propia vida - le contesté - más que a mi propia vida.
Me regaló un beso en la mejilla. Nos quedamos ahí, frente a la luna, frente a la infinidad de la oscuridad de la noche que majestuosa se extendía ante nosotros. Cerré mis ojos. El momento pasaba, los segundos, los minutos, las horas.
- A veces pienso que esto sólo es un sueño y que en cualquier momento despertaré - su voz era el único sonido que ahora se escuchaba
- No quiero que eso pase, si esto es un sueño, quiero vivir eternamente dormido - la abracé fuertemente, sólo pensar la idea, ¿estar dormido? era lógico, pero no quería, la sujete entre mis brazos, no la quería soltar, tenía miedo de que se desvaneciera. Sentí sus brazos rodeando mi cintura, su cabeza acurrucada entre mi pecho.
- Esto es real, lo es - Llevé mis dedos a su boca, dibuje sus labios con las yemas, parecían de seda, cerró los ojos, agaché la cabeza, cerré mis ojos y busqué su boca con mis labios, la besé.
Sostenía su  rostro entre mis manos, ella echó sus brazos a mi cuello, sentí como si estuviera tomando agua en medio del desierto, aquel simple beso para muchos, para mi había abierto un paraíso. Sentí elevarme en el aire, me olvidé del mundo entero, ahora sólo eramos los dos, nada más existía.baje mis manos a su cadera, quería que aquel momento fuera eterno.
No necesitaba las palabras, ya no necesitaba nada, sólo tenerla ahí, entre mis brazos, con mis labios junto a los de ella. Ella era excepcionalmente hermosa, lo más perfecto que he visto en mi vida.

viernes, 8 de junio de 2012

Una chica especial...

Ella era diferente de todas las demás, su belleza era sutil, era bonita, guapa y era encantadora, linda de esas personas en las que puedes confiar aún cuando no la conocías, sus ojos tenían ese brillo especial y su sonrisa era la cosa más linda que podías ver jamás, su andar y el rastro de perfume que dejaba al pasar, ella era todo lo que cualquiera podría querer. Ella podía enamorar a cualquiera con tan sólo mirarlo, sin embargo desconocía esto, y muchos corazones fueron rotos sin quererlo. 

Daniela, ese era su nombre, la perdición de cualquiera que se atreviera a mirarla y hablar con ella. Incluso cuando llegaba a cualquier lugar se sentía un cambio en el ambiente, era tan inocente, pobrecita, jamás había conocido el amor hasta que un terrible día ella se enamoró; él era diferente de cualquiera otro que hubiera conocido, cayó rendida ante sus pies, pero el joven la ignoraba, aún su belleza, su sonrisa, su mirada, su hechizo no pudo contra su indiferencia. Daniela hizo todo por conquistarlo, quería probar sus labios y abrazar su cuerpo, quería que él la amara tanto como ella lo hacía, pero todo era en vano, él ni siquiera la miraba, probó todos su vestidos, su manera de andar, de peinar, el perfume pero nada parecía hacer efecto, lo que ella  ignoraba es que aquel chico tan apuesto ya estaba enamorado.

La bella chica, aquella que podía enamorar a cualquiera, aquella que tenía el mundo a sus pies había entregado el corazón a la persona equivocada.



viernes, 1 de junio de 2012

Felicidad...

Como cuando llueve y todo mundo corre, así me siento ahora, quisiera correr, pero no está lloviendo.

Pero esto que siento, arde en mi pecho, no sé, jamás lo había imaginado, puedo sonreír, ya no duele más, nunca más, no otra vez.

Ya no me importa más lo que piensen de mi, soy libre, al fin soy libre, ahora puedo disfrutar del sol, de la  brisa, de la lluvia, del calor, del frío, ahora ya puedo vivir. Sí, ahora sí voy a disfrutar de todo esto, no quiero más, ya no puedo más seguir encerrada, ya nunca jamás. 


Podría sonreír para siempre. 

Pero, tan sólo fue un sueño, vuelvo a despertar, sigo encerrada aquí, jamás he conocido nada más allá de estas paredes, de su gris, del frío que llega hasta los huesos, sigo aquí, y aquí, aquí es donde sé que voy a morir.

domingo, 27 de mayo de 2012

Aniversario... 1 año de Memorias Olvidadas

1 año, un 1 año ya con mi blog, aún no puedo creerlo, después de todo sigo aquí... Pensé que no lo lograría, pensé que mi blog se vendría abajo, pero no, aquí está, ya cerca de las 2000 visitas, y no puedo hacer más excepto agradecerles... 
GRACIAS














"Despierto... solo y con un gran vacío en mi estomago, veo una cálida luz en la obscuridad, me acerco y no siento nada... camino lentamente hacia ella y no la alcanzo, esta muy alta, grande y redonda rodeada de pequeños puntos con un singular brillo... recuerdo haberla visto antes, volteo a mi alrededor... personas como yo... la mayoría no piensan ni hablan, solo vagan buscando vidas que succionar, me siento vacío... no es por comida... solo comemos para sentirnos "vivos", la vida ya no tiene sentido... es solo otro día con la misma rutina... quisiera poder volver a dormir pues ya no quiero despertar... "

Anónimo




Mary

"You know I love you, I will always do"
Lucy


Anónimo


"Quería decirle que la amaba como a nadie más en este mundo, pero no me atreví jamás, ahora me arrepiento, pues por fin supe que ella estaba enamorada de mi"
Lalo

"Una vez en algún lugar leí "Escribir es la salida de un amante frustrado" y ahora todo lo que pienso está en cientos de cuadernos"
Anónimo

"No sabía cuanto lo necesitaba hasta que un día lo perdí, ya no supe más de él, me sentía destrozada, pero jamás me di por vencida, la vida continuaba con o sin él, seguí adelante, con la mirada en alto, jamás mire hacia atrás, ya no había nada para mi, ahora sólo me esperaba un futuro lleno de cosas que estaba por descubrir... Eso es lo que ahora soy"
Gaby



miércoles, 23 de mayo de 2012

Un viejo poema...

Bueno, esta vez les escribiré un poema que me dedicó un novio mío hace ya un tiempo, espero que les guste, lo encontré ayer viendo mis "cajitas de recuerdos", que bonitas son las memorias que dejamos en el olvido, me sacó tantas sonrisas encontrar algunas cosas. Por cierto, es buen momento para recordarles que aún tienen unos días para mandarme sus fotos/escritos/loquequieran a mi correo freak_09@hotmail.es, de verdad que les agradezco mucho, pensé que no me llegaría nada, sin embargo ya tengo varias cosas, esto es por el Aniversario del blog, el 27 cumplo un año ya, bueno sin más que decir, les dejo disfrutar.




Ella es toda mi vida
y no sabe
no sé porque
no me atrevo 
a decirle que la amo.

Si ella supiera 
lo que siento
seguro estoy
que me daría su amor
si ella quisiera con solo
un beso que me diera...

Se enamoraría
y yo viviría solo para ella
no me importaría
darle toda mi vida
y un poquito más de mi.

Si yo me atreviera 
a decirle que por ella
yo he escrito mil canciones
y he bajado mil estrellas,
que estoy construyendo 
un mundo lleno de esperanzas
donde va a ser feliz 
y vivirá enamorada.

Si ella supiera
como la estoy queriendo
que he intentado mil cosas
y me quedo en el intento
dios mio dame fuerzas
para decirle que la amo
que no pienso más que en ella
que estoy enamorado.

Si ella supiera como
la estoy queriendo
no estuviera como un tonto
aquí, sufriendo.

LAHG

lunes, 21 de mayo de 2012

El silencio de un corazón...

Sus almas estaban destinadas a estar juntas, nada jamás podría separarlas, ni aún el más grande odio. Su amor era tan puro, tan verdadero, no, el paraíso no se comparaba con aquella alegría de dos enamorados. 

El cielo contemplaba la dicha eterna de esa pareja, los ángeles envidiaban tanta felicidad; no podían creerlo posible, ¿dónde estaba el rencor, el orgullo, la vanidad, la desconfianza, los celos?. Pero ellos eran uno solo, un corazón en dos cuerpos distintos, uno mismo, para siempre, sin el otro morirían sin más, sus manos entrelazadas era lo único que necesitaban, besar sus labios, contemplar sus cuerpos, entregarse a la pasión desenfrenadamente, sin cordura. El amor es cuestión de locura, de deseo. 

Rozar la piel del otro y poder llegar al placer más infinito, gozar la dulce agonía de no verse. Sí, era amor, sus almas estaban unidas, conformaban sólo una. Y aún cuando el sol siga siendo esclavo de la luz, y la luna esclava de la noche ese amor no se consumaría, sería la eterna llama, por siempre prendida.

Dulce silencio que condena a las palabras, llévalos hasta el fin del universo, donde nunca más estarán separados y sus cuerpos uno solo formaran. 

Eterno amor que produce veneno, no los dejes ya más, que sin el otro no pueden vivir, llénalos de gozo y de dulces alegrías, colmalos de sonrisas, y jamás les abandones. 

Sangre de su sangre, que su corazón lata por sí mismo, que no deje huella de algo enfermizo, esto no fue obsesión, esto se llama amor. Llénalos de esperanza, de caricias inesperadas, que sus cuerpos se agoten de besos, que no conozcan nada más allá de sus estos. 

Sí, los ángeles celosos no pueden evitarlos, empiezan a burlarse, pero ellos siguen amándose, cierran los ojos, no escuchan una palabra, sus ojos se fijan en los del otro, no conocen nada más, una tenue luz intenta pasar a través de ellos, pero desdichada fracasa, nada puede separarlos, están perdidamente enamorados, pero no, esto va más allá, es la necesidad del otro que los hace levantarse, que no se dejan vencer, su extrema adoración, su inmenso amor, eso, eso es lo que lo ángeles desean, y que sin embargo jamás podrán tener, porque ellos, ellos eran la misma persona separada en dos.



domingo, 20 de mayo de 2012

Errores...

No sé, siento que la vida a veces es injusta. O quizá sea que he errado demasiadas veces. 

De todos modos he vuelto a equivocarme, una vez más. Tal vez sea porque jamás he hecho las cosas bien, sí, es lo más probable, sin embargo duele, duele saber que no acerté, quisiera poder pensar que tan sólo estoy exagerando, que las cosas no son como las pienso, pero no, puedo sentir que no es así, todo tiene un fin, yo sólo me estoy acercando a este. 

Quisiera poder decir que todo estará bien, pero en estos momentos no puedo, pensé que iba a ser diferente, pero no lo fue.

"Tonta, eso es lo que eres, una tonta" son las palabras que pasan por mi mente, me las repito una y otra vez, debo de entenderlas, debo de grabarmelas; y a pesar de todo no me arrepiento, no, yo nunca lo hago, no es que sea orgullosa, pero las cosas que hice no las puedo cambiar, de nada sirve arrepentirme, siempre lo he pensado así, nadie puede cambiar el pasado, lo hecho, hecho está. 

Y así es como he vuelto a escribir, porque después de todo es lo único que siempre hago bien, en lo único en lo que puedo decir lo que quiera, lo único que calma mi dolor.

Cierro mis ojos y lo veo, puedo pensar en sus sonrisa, en sus ojos, su voz, siento sus brazos alrededor mío, duele, duele demasiado, quiero llorar, pero debo ser fuerte porque quizá sólo estoy exagerando.

¿Sufrir por un amor? No, no vale la pena, yo no sufro por amor, sufro por recuerdos, sufro por momentos, sufro por el pasado, sufro por todo eso, pero ¿por amor? no, por amor jamás; no significa que no me lastime, porque ahora mismo siento que esto me quema por dentro, que de un momento a otro esto que siento me vencerá, a pesar de todo simplemente debo ser fuerte, siempre, sin importar nada, así es como soy, nada puede quebrarme. 

Lucho contra mi misma, pero de nada va a servir, podría decirle mil y una cosas, y no lo haré cambiar, así debía de ser, ahora sólo debo esperar al gran capítulo final. Podrían decirme "No te rindas, si lo quieres no lo hagas", pero no, no es que no lo ame, porque sí, lo amo, solamente es que yo no lo pienso así, sólo dejo que las cosas fluyan, que sigan su curso, no puedo predisponerme al destino y querer cambiarlo. Ante todo debo de seguir sonriendo. 


"Lo siento" se dibujan las palabras en mi boca, quizá nunca fui lo que él esperaba, quizá yo fui su único y más grande error. 



domingo, 13 de mayo de 2012

Lo real irreal...

Jamás conocí a nadie igual. Ella era tan perfecta, tan irreal. 

Sus labios carmín.
Su piel de porcelana.
Sus ojos esmeralda.
Su sedoso cabello.
Su dulce mirada.
Su armoniosa voz.
Su cuerpo perfecto.
Su frágil caminar.
Sus pequeñas manos.
Su tentador aroma.
Sus extrañas manías.
Su hermosa sonrisa.
La sutileza de sus movimientos.


Sí, quizá estaba enamorado.