martes, 11 de octubre de 2016

La sonrisa del demonio...

Esta es la historia de una chica que alguna vez lo tuvo todo y que, como todo mundo, no lo valoro para finalmente perderlo. 

No, está historia no tiene nada de especial, no es diferente a cualquiera que ya se haya contando antes, quizá la única diferencia es que aquí la chica era un demonio disfrazado que se enamoró de un simple humano, al principio lo negaba, no quería aceptarlo hasta que prácticamente se volvió inevitable. En un comienzo todo era soñado, no creía posible encontrar una mayor felicidad de la que ahora gozaba, ella, un demonio, siendo feliz, con los ojos llenos de alegría, de ilusión, ¿como era aquello posible? Pensó que todo eso jamás tendría fin, la mentira favorita de todos los enamorados. Claro que tendría fin, nada dura para siempre.

Pasaron los días, las semanas, los meses, los años y ellos seguían tan enamorados como en los primeros días, a veces creo que aún siguen así, pero los problemas llegan y con ellos no fueron la excepción, las discusiones comenzaron, las lágrimas ya no eran de felicidad, comenzaban a ser de ira, de impotencia, los días de silencio entre ellos eran cada vez más, todo se empezaba a derrumbar , pero ninguno era capaz de verlo, a veces se mentían diciendo que todo iba a pasar, que esa situación era solo pasajera, que estaban destinados a estar juntos, que nada los separaría, pero al demonio en el fondo sabía la verdad, sabía que todo estaba llegando a su fin, simplemente no quería aceptarlo, pasó el tiempo y la situación cada vez se volvía más tensa, quizá todo eso había sido un error, ¿en qué pensaba el demonio cuando beso por primera vez al humano? ¿Que tendría su propio cuento de hadas adaptado? Solo se engañaba. 

Finalmente llegó el día, estaban discutiendo una vez más, la ultima vez, el demonio entre lágrimas le gritó que no quería volver a verlo, que ya estaba cansada de tantas peleas, el humano se derrumbó. 

El demonio volvió al infierno, a veces veía a su humano desde ahí, al principio lo veía desolado, devastado, pero el tiempo lo cura todo y después de algunos años, lo vio reír por primera vez, pobre del demonio, todas sus ilusiones se fueron con esa risa, no lo malentiendan, fue feliz por ver a quién amaba reír, pero no pudo evitar ser destrozado por la idea de que ya no era ella quien lo hacía reír, no podía seguir viviendo así, le esperaba toda la eternidad por delante, tenía que hacer algo al respecto, pero solo había una única opción, un demonio puede sacarse el corazón y seguir viviendo, la única consecuencia es que no volverá a sentir, pero la decisión estaba hecha, tomó un cuchillo entre sus manos, lo clavo en su pecho, volteo a ver la pantalla para poder ver a su humano por última vez, una lagrima rodó por su mejilla, extendió el corte para poder meter su mano, una última sonrisa se dibujó en su rostro, busco con sus dedos como desconectar su corazón y finalmente lo sacó. 







martes, 15 de marzo de 2016

Día 5

Hoy mandaste un mensaje diciendo lo mucho que me extrañabas, que ya no querías estar más sin mi, que estos días sin hablarme te habían hecho ver que te importaba más de lo que creías y cuando apenas te iba a contestar, levantaba mi mirada más allá del celular, ahí estabas, esperándome, sonriendo, corrí a abrazarte como en los viejos tiempos, me quedaba mucho rato entre tus brazos mientras sollozaba y tú pasabas tus dedos entre mis cabellos "todo va a estar bien ahora" dijiste... 

Desperté, solo había sido un cruel sueño que se burlaba de mi, probablamente tú estabas feliz sin mí y yo me estaba dando una importancia que claramente no tenía en tu vida, frote mis ojos y me levanté de la cama; tengo que verlo, así sea a la distancia, solo quiero saber qué está bien y que es feliz.

lunes, 14 de marzo de 2016

Día 4

Hoy amanecí con ganas de extrañarlo. Creo que comienza a crearse una grieta en el frasco donde encerré mis sentimientos.

Fue un fin de semana extraño, de alguna manera u otra tenía cierta costumbre y romperla creó sentimientos encontrados en mi, por primera vez en mucho tiempo me vi libre de hacer lo que quisiese, de caminar sin rumbo fijo y por otro lado, extrañe su risa, su voz, su aroma y la calidez que sentía cuando me rodeaba con sus brazos, supongo que es cuestión de tiempo para olvidarlo, pero ciertamente no lo deseo así, ¿cómo olvidar algo que en su momento te hizo sumamente feliz? Fácil, no lo haces, solo lo recuerdas con melancolía sabiendo que lo importante es que pasó y que eso nadie te lo va a quitar.

Y, ¿quién sabe? quizá algún día volvamos a vernos, a platicar, a reír, sabiendo que cualquier vieja herida ha curado, que ahora somos felices siendo quienes somos.

viernes, 11 de marzo de 2016

Día 3

Hoy el cielo volvió a ser de un azul muy intenso, me gustan los días así, cuando siento el calor del sol sobre mi piel y el viento susurra su canción. 

Todo el día pensé en ti, en lo que sería estar entre tus brazos y estar acostados mirando las ramas de los árboles bailar con las corrientes del aire, no tarde en quedarme dormida, imaginando momentos que por ahora no pasarían. 

Tengo tantos planes, tantas ideas, que no sabría por dónde empezar, solo sé que necesito tener tu mano entrelazada con la mía para poder ser plenamente feliz, sin restricciones.


jueves, 10 de marzo de 2016

Día 2

Hoy he descubierto que me has dejado pistas sobre tu regreso, me has hecho sonreír tanto que casi lloro de felicidad, "no me daré por vencido" fueron tus últimas palabras, las tengo presente conmigo diariamente. 

En el día el cielo fue tan azul que me parecía casi irreal, es cierto lo que dicen, después de la tormenta siempre llega la calma; en la noche pude ver las estrellas y entonces supe que tú también las estabas viendo, pude sentir como sostenías mi mano mientras decías que la estrella más brillante era la que algún día sería mía, la luna mostraba una leve sonrisa, después volví a la realidad, no estabas ahí pero sé que al menos veías el mismo cielo que yo, en ese momento fue cuando entendí que dos personas no tienen que estar físicamente juntas para, bueno, valga la redundancia, estar juntas, que basta con que ambas miren al cielo pensando lo mismo. 

miércoles, 9 de marzo de 2016

Día 1

Hoy me regocije entre tantas memorias que me fue imposible estar triste, la gente me pregunta cómo puedo no estarlo después de haberte perdido, yo solo pude reírme al respecto, ¿perderte? no, yo no te he perdido, pero ellos no lo entenderán, ¿cómo podrían? ... 

Ayer estabas a mi lado, sonriendo mientras te llenaba la cara de besos, hoy que no estuviste aquí me di cuenta de que la lluvia es aún más hermosa de lo que pensé, que si escuchas al viento puedes escuchar una suave melodía, me di cuenta de que podía oírle decir que debía ser feliz; no es que no lo hubiese notado mientras estaba contigo, solo que no le había puesto tanta atención. 

No puedo estar triste después de todas las alegrías que vivimos. Solo puedo seguir.