miércoles, 29 de febrero de 2012

Decepción...

No podía creerlo, bien, sí podía, pero no quería...
Quizá jamás fue lo que pensé que era.
Quizá siempre me mentí a mi misma.
Quizá, pero ahora ya no me sirve de nada saberlo.

No sabes como me duele ver lo que eres.


Tenía tanto miedo de saber que era real.
Quería pensar que sólo alucinaba, pero no, no era así.
Realmente nunca supiste querer.
Duele, quema, me mata.
¿Odiarte? no, eso jamás.

Lo siento, igual tenía que suceder.



jueves, 23 de febrero de 2012

Un momento...

Por un momento pensé que había muerto...
Sólo fue un instante
pero pude recordar cada detalle
el viento contra mi cara
el frío sudor recorriendo mi frente
el incesante palpitar de mi corazón
mi agitada respiración,
y la sangre, la sangre
saliendo de alguna parte de mi cuerpo.
Pero no, tan sólo había sido un sueño
las lágrimas brotaban de mis ojos
la muerte aún estaba conmigo
cada día, cada momento,
siempre a mi lado.
Jamás se iría, eso lo sé, 
fue como sumergirte en el océano.
Las dudas te embriagan,
no te dejan pensar
simplemente no puedo más
cierro mis ojos
no quiero sentir de nuevo.
Los arroyos invaden el bosque
el sol no deslumbra más
todo ha terminado.






domingo, 19 de febrero de 2012

Un poema...

Bueno, esta entrada será un poema italiano, un poema que la verdad me gustó mucho, espero que ustedes también lo disfruten...


Verrà la morte e avrà i tuoi occhi -
questa morte che ci accompagna
dal mattino alla sera, insonne,
sorda, come un vecchio rimorso
o un vizio assurdo. I tuoi occhi
saranno una vana parola,
un grido taciuto, un silenzio.
Così li vedi ogni mattina
quando su te sola ti pieghi
nello specchio. O cara speranza,
quel giorno sapremo anche noi 
che sei la vita e sei la nulla.

Per tutti la morte ha uno sguardo.
Verrà la morte e avrà i tuoi occhi.
Sarà come smettere un vizio,
come vedere nello specchio
riemergere un viso morto,
come ascoltare un labbro chiuso.
Scenderemo nel gorgo muti.

[22 Marzo 1950]
Cesare Pavese


Y como sé que no todos saben italiano, les pondré la traducción...

Vendrá la muerte y tendrá tus ojos -
esta muerte que nos acompaña
de la mañana a la noche, sin sueño,
sorda, como un viejo remordimiento
o un vicio absurdo. Tus ojos
serán una vana palabra,
un grito ahogado, un silencio.
Así le veo cada mañana
cuando se inclina sobre ti
en el espejo. ¡Oh! querida esperanza,
ese día sabremos también nosotros
que eres la vida y eres la nada.

Para todos la muerte tiene una mirada.
Vendrá la muerte y tendrá tus ojos.
Será como dejar un vicio,
como ver en el espejo
resurgir un rostro muerto,
como escuchar labios cerrados.
Bajaremos al silencioso abismo.

Quizá mi traducción no sea exacta, pero es lo que quiere decir el poema... la verdad ahorita no sé que creer, pero esto siempre me ayuda... 


domingo, 12 de febrero de 2012

Más allá del cielo...

Me sentía desesperada, ahí estaban los dos, peleando, discutiendo, y todo era mi culpa, era por mi amor...

Me senté en una esquina, me llevé las rodillas hacia mi cara, abracé mis piernas, las lágrimas fluían de mis ojos, no quería aquello, tan sólo quería verlos felices, y ahora, todo había terminado mal, yo amaba a ambos, y había descubierto que aquello era posible, era el mismo amor, la misma necesidad de tenerlos, de sentir su aroma y su cuerpo, no podía elegir, no podía dejarlos. Los gritos cada vez eran más fuertes, los pedazos de mi corazón regados por doquier en aquel oscuro callejón, con cada palabra, con cada cosa que ellos hacían...

- ¡Basta! ¿Qué no entienden? ¡Me están matando! - pero no me escucharon, ahora yo no era nada, tan sólo estaba ahí, como un trofeo, no importaba lo que yo sintiera, los recuerdos me atormentaban, tapé mis oídos con mis manos, cerré los ojos, ya no podía más, imágenes pasaban por mi cabeza, memorias, palabras, ahí estaban ellos, había llevado la relación con ambos, quería decirlo, pero sabía que no entenderían, ¿Por qué? ¿No había otro final? tan sólo deseaba felicidad. "Te amo" resonaba en mi mente, no, no, no, ya no podía más con aquello, me levanté, fui hacia ellos, les supliqué, les rogué, pero sólo me miraron, el sudor recorría sus frentes, un poco de sangre que tenían en su boca, su nariz... De pronto ellos se quedaron paralizados, sus caras estaban blancas, uno retrocedió un poco.

- ¿Pero qué demonios...? - no entendía que pasaba, tan sólo me miraban con los ojos abiertos, volteé a ver si veía algo, pero no encontré nada, no había nada atrás de mi 
- ¡Ah! - solté un alarido, coloqué la mano en mi estomago, estaba húmedo, miré mi mano
- Es sangre... - estaba sangrando, aquel líquido escarlata cubría mi palma, mis dedos, escurría hasta llegar al suelo, las cosas se tornaron borrosas, perdí el equilibrio, caí, sólo escuché como ellos fueron hacia mi, me sostuvieron entre sus brazos, me pedían perdón, pero ya era muy tarde, comencé a escupir sangre, todo me dolía, era punzante, sentía el fluir de la sangre a través de mi garganta, era un sabor dulce, se sentía cálido, no podía hablar, quise decirles que no se preocuparan, que todo estaría bien, pero cerré mis ojos, tan sólo fue por un instante, estaba cansada, agotada, sólo quería descansar, y eso, eso es lo último que puedo recordar...

sábado, 11 de febrero de 2012

Música...

La música es eso que marca el alma, que te hace sonreír, que te hace llorar, que te lleva a un mundo más allá del nuestro...

Pero la música no es sólo una canción, puede ser el viento al pasar entre las hojas, el pasar del agua a través del río, las olas del mar derrumbándose en la arena, el caminar de una persona, puede ser tantas cosas.


Escuchar un sonido que te hace sentir que no estás sólo, escuchar la letra de canciones que sabes que no eres el único que se siente así, la música es eso que nos une, sin importar el género...

Escuchar unos acordes y sentir como fluyen dentro de ti, no poder evitar mover el pie, la mano o tan sólo escuchar...

Por que yo no puedo evitar cantar, querer bailar, porque siento la música dentro de mi, cada instante, no puedo estar sin ella, me siento vacía sin mis audífonos, sin canciones, sin escuchar la lluvia, el viento... porque ella es mi vida, es parte de mi y yo jamás quiero dejarla...