lunes, 14 de marzo de 2016

Día 4

Hoy amanecí con ganas de extrañarlo. Creo que comienza a crearse una grieta en el frasco donde encerré mis sentimientos.

Fue un fin de semana extraño, de alguna manera u otra tenía cierta costumbre y romperla creó sentimientos encontrados en mi, por primera vez en mucho tiempo me vi libre de hacer lo que quisiese, de caminar sin rumbo fijo y por otro lado, extrañe su risa, su voz, su aroma y la calidez que sentía cuando me rodeaba con sus brazos, supongo que es cuestión de tiempo para olvidarlo, pero ciertamente no lo deseo así, ¿cómo olvidar algo que en su momento te hizo sumamente feliz? Fácil, no lo haces, solo lo recuerdas con melancolía sabiendo que lo importante es que pasó y que eso nadie te lo va a quitar.

Y, ¿quién sabe? quizá algún día volvamos a vernos, a platicar, a reír, sabiendo que cualquier vieja herida ha curado, que ahora somos felices siendo quienes somos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario